Tras cuatro temporadas acompañados
por el programa infantil 'Barrio Sésamo', TVE decide renovar su franja de tarde
con 'Los mundos de Yupi'. Hasta entonces, la televisión pública sólo se hacía
cargo de la trama con personajes reales y de algunas tiras sobre tradiciones
españolas. Pero ahora se involucraría al completo realizando cada emisión
como producción propia.
Yupi llegó a TVE el 18 de Abril de 1988 y supuso un gran cambio al dejar
atrás una etapa importante donde Espinete se había ganado todo el cariño de
los niños y niñas de España. Llevado por la moda de los extraterrestres en
los 80, los personajes principales vienen de Tacatón en una nave espacial.
Aterrizan en un pueblecito de origen desconocido ante la cara de sorpresa de sus
habitantes. Son Yupi, un ser sin sexo definido, de color naranja, algo
regordete, con pecas y unas simpáticas antenas, interpretado por la actriz
Consuelo Molina. Y Astrako, un experto en tecnología y tripulante de la nave,
con unas grandes orejas y un traje espacial en verde y gris, cuya vida se debía
al actor Alfonso Vallejo, 'Don Pimpón' durante años. Pronto se ganaron el cariño
de los vecinos del barrio, un espectacular decorado donde se reproducía el
entorno natural de los pueblos de España. Un callejón que llevaba a la casa de
Ernesto y Berta, una pareja casi idílica si no fuera por las discusiones
peculiares ante asuntos de la más absurda naturaleza. Ellos eran Carlos Manuel
Díaz, ex marido de la cantante Karina, e Isabel Ordaz, magnífica actriz en
posteriores series como 'Pepa y Pepe', 'Aquí no hay quien viva' o 'La que se
avecina'. Después venía la tienda de Damián. El tendero era el veterano actor
Pepín Salvador, que luego seguiría triunfando en la serie 'Periodistas'. También
estaba el colegio, con la profesora Lola, la simpática Encarna Aguerri. Y el
chapuzas Teo, un experto en infantiles llamado Luis Perezagua y que acababa de
terminar su labor como la voz del electroduende Maese Cámara en 'La bola de
cristal'. Más allá del barrio se encontraba la casa de la abuela Ebelina,
interpretada por la magistral actriz Aurora Redondo, que dotaba al programa de
un toque de profesionalidad brillante al contar con una de las mejores
profesionales de la escena y que ya contaba con 88 años en ese momento. Su
nieta en la ficción era Diana Rubio, uno de mis primeros amores platónicos y a
la que llegué a enviar una carta de amor a TVE. Ella era Paula, la mejor amiga
de Yupi, y con el que cantaba, bailaba, jugaba y reñía, claro está. Y algunos
de sus amigos, como Lara de Miguel, más conocida después por su labor en la
serie 'Compañeros'.
Además de las tramas que vivían estos personajes, estaban las tiras
animadas y los pequeños documentales sobre las primeras experiencias con la
naturaleza, la gastronomía o el deporte de los más pequeños. Y por supuesto,
una serie de marionetas que querían seguir la estela de los Teleñecos y que se
quedaron a medio camino pese a ser bastante simpáticos y cercanos al público.
Había tres escenarios importantes: los niños Tuco y Canica, con vivencias
infantiles y donde siempre acababa alguno de ellos con el ánimo decaído por la
mala interpretación de su compañero, por haber jugado al equívoco; el
laboratorio de experimentos con Pi y Tágoras, que realizaban todo tipo de
pruebas que solían acabar bastante mal y quedando el primero desconcertado ante
la poca capacidad de entender las cosas del segundo, cuya voz pertenecía al
famoso actor de doblaje Carlos Revilla, KITT en 'El coche fantástico' y que en
sus últimos meses de trabajo en la serie de Yupi recibió la llamada de los
encargados de doblar una nueva serie de televisión llamada 'Los Simpson', pues iba
a ser la voz de su personaje protagonista, Homer. El tercer escenario era una
nave espacial comandada por Steri y Grou, dos atontados que se veían envueltos
en mil aventuras con seres extraños y en medio de las galaxias. Además, un
conjunto de marionetas extras de apoyo para las historietas de los más
relevantes, como una gallina, un gorila y demás animales. Por cierto, una de
sus manipuladoras era Isabel de Castro, la eterna 'Ana' de 'Barrio Sésamo' Y
todo, salpicado de cancioncillas con aire pedagógico y escritas por la simpar
July Murillo, experta en inventar letras para los más pequeños.
A lo largo de un año y medio se vivieron decenas de aventuras cargadas
de un toque moralista pero algo más adultas que las que se sucedían en el
querido Barrio Sésamo. Y precisamente fue ese barrio, en su etapa con Caponata,
el que relevó a Yupi durante unos meses, mientras se preparaba la segunda parte
del personaje extraterrestre. A principios de 1990 se rodaron un centenar de capítulos
de la nueva etapa. Esta vez, los tremendos decorados de una pedanía dejaban
paso a los más recónditos parajes estelares puesto que Yupi, Astrako y varios
personajes más de la serie se introdujeron en la nave espacial y acabaron en un
planeta perdido. Tras el precipitado aterrizaje, se encontraron con varios
personajes que se harían habituales. Principalmente, Martín, un señor
mayor que había caído en el planeta muchos años atrás, por lo que su
aspecto vetusto con boina estaba acompañado por una larga y descuidada barba al
más puro estilo 'Don Cicuta'. Realmente era el veterano actor Luis Barbero. Allí
aparecieron también Anube, una especie de hada cariñosa y con propuestas idílicas,
interpretada por la actriz Marina Carresi, y el robot P-Goto, una suerte de
lavadora parlanchina y en cuyo interior se encontraba la diminuta Sara Matute,
que apareció hablando de su personaje en el magazine de Fernando García
Tola, 'Corazón'. La nave era atacada por habitantes del planeta exterior al más
puro estilo 'Star Tek' y vivieron extraños fenónemos en cada capítulo. En el
titulado 'Crepundia, el país de los cuentos' se topaban con la mismísima Penélope
Cruz, en su primera intervención televisada. Otras futuras estrellas del medio
también realizaron breves apariciones, como la presentadora del concurso 'Sin
vergüenza', Ángeles Martín.
En esta etapa se producen dos fallos de continuidad. El primero es el
papel de Berta, la esposa de Ernesto. Isabel Ordaz no renovaba su contrato y era
sustituida por Estela Domínguez, aunque no se da ninguna explicación al cambio
de actriz. Esto ha ocurrido en muchas ocasiones en series americanas como
'Dinastía', 'Santa Bárbara' o 'El Príncipe de Bel Air'. La otra fue la del
cambio de voz del muñeco galáctico Steri ante la marcha de su actor de
doblaje. Pero no todo el elenco de la primera parte repetía, se quedaban en el
poblado la abuela, la maestra, el tendero o el chapuzas Teo. De ellos nunca más
supimos, ni siquiera en el capítulo navideño en el que deseaban poder cenar
con sus viejos amigos. Lo conseguían, pero ninguna cara conocida aparecía en
primer plano, una oportunidad perdida de recuperar algunos personajes. La nueva
Berta con Ernesto, Paula, Lara y el amigo de estos, Jesús (Jesús Martínez)
fueron los elegidos para estar en esa nave espacial que recordaba en su formato
exterior a la de 'E.T. el extraterrestre'. En su interior, un gran panel de
mandos, una escalinata, una barra para poder bajar de la primera planta al más
puro estilo de los bomberos, las salitas, un teletransportador de espacio y
tiempo (que llegó a conseguir que les visitaran los Reyes Magos) y muchas,
muchas luces intermitentes.
El espacio finalizó porque TVE consideraba que era una serie demasiado
enfocada al público adulto siendo para pequeños y en lugar de realizar una
nueva adaptación, prefería poner punto final y abrir un nuevo horizonte en los
espacios infantiles, que no les dio buen resultado. 'La tira de cuentos', 'Nana
Bunilda' o los 'Bububu' de Lolo Rico fueron algunos de los sonoros fracasos
hasta 'PINNIC', el siguiente infantil en llamar la atención. Entre medias, Yupi
tuvo aún su última oportunidad en una breve serie titulada 'Los cuentos de
Yupi' donde se narraban conocidas historias populares versionadas por las
marionetas de las series regulares con Yupi como uno de los narradores. Eso sí,
la voz del alienígena cambiaría por la de otra actriz, nuevo fallo de
continuidad. Y aunque sería la última vez que viéramos al simpático
personaje, el dicho 'estar en los Mundos de Yupi' ha quedado en el acervo
popular como acepción de 'ser despistado' o 'quedarse obnibulado'. Incluso Bart
Simpson aludía a esta serie cuando les preguntaba a los extraterrestres de uno
de los habituales especiales de Halloween 'La casa del árbol del terror' si en
su nave podían ver 'Los mundos de Yupi'. Seguramente, esta licencia en los diálogos
se debía a que parte del equipo de doblaje de Yupi estaba inmerso en la serie
amarilla.
De la serie se sacó cierto merchandaising como una caja con 'Los juegos
de Yupi', barajas de cartas, pequeños muñecos, un disco con las canciones
del programa y una colección de libros basados en los personajes y acerca
de aspectos educativos. Yupi apareció en dos ocasiones fuera de sus escenarios
habituales. En una, fue entrevistado por el periodista Andrés Aberasturi para
el programa 'Por la tarde', y en otra, se reencontraba con su amiga Lara en el
plató del 'VIP guay' de Tele 5, su competencia, y donde ejercía de
copresentadora infantil. Además, 'Los mundos de Yupi' quedó en la historia de
TVE al ser en 1988 el primer espacio infantil español que entraba en el libro récord
Guiness por ser el más caro hasta el momento. Cada capítulo costaba 6 millones
de pesetas, que era la acumulación del elevado coste de los muchos decorados (más
aún en la etapa final, la del otro planeta) más los sueldos de los
muchos actores, manipuladores de muñecos, los propias marionetas creadas en
Estados Unidos por Amado Rehak y el equipo de producción. Una
serie de Antonio Torres Leal, responsable también de las etapas de Espinete, y
cuyo recuerdo sigue imborrable entre los niños de esa época, que vivíamos,
muy felizmente, en los mundos de Yupi.
Consuelo Molina (entrevista con la
actriz que interpretó a Yupi)
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